El martes 23 de enero, la comisión de Derechos Humanos del Senado sesionó con el fin de revisar la situación de niños de nacionalidad chilena, ya sea hijos de padres extranjeros o connacionales, que decidieron dejar el país para trasladarse hacia Norteamérica, atravesando varios territorios, pero con enormes riesgos para sus derechos.
En la sesión, los senadores y senadoras recibieron los informes de la Defensoría de la Niñez y del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los refugiados, quienes confirmaron que más de 17 mil niñas y niños chilenos, ya sea de padres venezolanos o haitianos, o uno de sus dos padres chilenos, sean encontrado durante los últimos tres años en las zonas fronterizas de Panamá, Guatemala y México, en muy malas condiciones sanitarias y bajo un serio riesgo de agresiones físicas, sicológicas y sexuales, durante el trayecto.
“Hemos venido a corroborar nuestra preocupación por esta difícil situación que implica la vulneración de derechos de niñas, niños y adolescentes de nacionalidad chilena y que se encuentran en contexto de movilidad, avanzando hacia la frontera norte, con la finalidad de llegar a Estados Unidos. Las cifras dan cuenta de una realidad preocupante, respecto de los cuales el Estado debe asegurar sus derechos, garantías y protección integral. Es importante un actuar coordinado entre el Gobierno, el parlamento, los organismos internacionales y nosotros como Defensoría de la Niñez», dijo Anuar Quesille, Defensor de la Niñez.
En la Comisión de Derechos Humanos se acordó oficiar a los consulados de países como Guatemala, México, Panamá, Perú, Bolivia, Bélice, Nicaragua, Costa Rica, Colombia, entre otros, con el objetivo de iniciar medidas de protección para niños, niñas y adolescentes en dicha situación, sobre todo porque la gran mayoría son menores de cuatro años. Además, se acordó pedir al Gobierno hacerse parte de todas las acciones legales correspondientes.
Fuente: ElInformador.cl